Los sorprendentes beneficios para la salud de comer hígado
Seguramente sobre muchas cosas, pero, específicamente sobre el hígado, tu abuela tenía razón.
El hígado probablemente no esté en la parte superior de tu lista de alimentos apetecibles. Pero antes de rechazar esta víscera, te sorprendería saber que es una potencia nutricional.
“Las personas han estado consumiendo hígado durante muchos siglos. El hígado encebollado es un plato clásico que se originó en la Edad Media en Europa”, dice Christiane Matey, R.D.N., fundadora de MINT Nutrition. Los franceses dominaron el arte de preparar el hígado en platos como el foie gras a la plancha o el paté en croute, a menudo presentados en menús de alta cocina.
“Durante mucho tiempo ha sido considerado un superalimento en el mundo del rendimiento físico. Los culturistas de los años 30 elogiaban los beneficios de comer hígado de res para mejorar su físico y rendimiento”, afirma Sarah Alsing, R.D., propietaria de Delightfully Fueled. “Hoy en día, la dieta carnívora promueve el consumo de hígado”.
A continuación, más información sobre los beneficios para la salud del hígado y cómo hacerlo más apetecible.
¿Cuáles son los beneficios para la salud del hígado?
Si puedes superar el sabor, el hígado es excelente para tu salud.
De todos los tipos de vísceras, el hígado es el más denso en nutrientes, asegura Matey. Proporciona proteínas de alta calidad, grasas saludables y una explosión de sabor umami. Además, es una gran fuente de varios nutrientes esenciales:
Vitamina B12
El Instituto Nacional de Salud de Estados Unidos (NIH, por sus siglas en inglés) enumera el hígado de res como la fuente más rica de vitamina B12, con tres onzas de hígado de res frito que proporcionan el 100% del valor diario.
“La vitamina B12 influye en el rendimiento atlético al apoyar la producción de glóbulos rojos, lo que aumenta el suministro de oxígeno a los músculos, apoya la función nerviosa mejorando la función muscular y desempeña un papel en la producción de proteínas”, explica Alsing. Un estudio encontró que niveles más altos de vitamina B12 se asociaron con niveles más altos de hemoglobina, lo que apoya el suministro de oxígeno a los músculos.
Vitamina A
El hígado de res también encabeza la lista del NIH como la mejor fuente de vitamina A, con 100 gramos de hígado proporcionando el valor diario completo.
“La mayoría de las personas asocian la vitamina A con el apoyo a la visión, pero también está involucrada en la función inmunológica, el crecimiento celular y la reproducción”, dice Alsing. “La vitamina A juega un papel en la curación de heridas y combate los radicales libres, lo que es vital para el rendimiento físico. Una deficiencia de vitamina A puede causar daño oxidativo en atletas competitivos”.
Sin embargo, tanto Alsing como Matey advierten que un exceso de vitamina A puede ser peligroso para la salud de algunas personas, y, por tanto, el hígado puede no ser para todos.
“No todos deberían consumir hígado con regularidad. Las personas con gota, hemocromatosis, toxicidad por vitamina A o colesterol alto deberían limitar o evitar el consumo de hígado”, dice Matey. Habla con tu médico sobre la cantidad de vitamina A que deberías consumir.
Folato
Así es, el folato también se destaca en la hoja informativa del NIH, con el hígado de res ocupando el primer lugar como la fuente más rica de folato, con el 54% del valor diario en tres onzas de hígado de res estofado.
“El folato es importante para el rendimiento atlético debido a su papel en la producción de glóbulos rojos. Más glóbulos rojos conducen a un mayor suministro de oxígeno a los músculos durante el ejercicio”, explica Alsing.
También proporciona “una dosis masiva de hierro, potasio, sodio, selenio, zinc, cobre, fósforo y vitaminas B”, añade. “Además de todos estos fabulosos macronutrientes y micronutrientes, el hígado contiene una variedad de compuestos bioactivos, como L-carnitina, creatina, carnosina, coenzima Q10, glutatión, ácido linoleico conjugado, taurina y péptidos”.
Estos compuestos bioactivos ofrecen numerosos beneficios para la salud. Son antioxidantes y antiinflamatorios, y ayudan a mejorar el metabolismo, la regulación de la glucosa en sangre y el apoyo inmunológico.
Además, las vísceras son una de las fuentes más asequibles de proteínas ricas en nutrientes, dice Alsing.
RELACIONADA: 18 Alimentos altos en carbohidratos para llevar tu entrenamiento al siguiente nivel
¿Cuál es la mejor manera de preparar el hígado?
No, el sabor distintivo del hígado no es para todos.
Alsing lo describe como “terroso”, pero comparte que cocinar el hígado adecuadamente puede hacerlo más agradable de comer. ¿Su mejor consejo?
“Remoja el hígado en leche durante al menos 30 minutos para suavizar su sabor y hacerlo más apetecible. Luego, sazona el hígado para añadir algunos sabores que disfrutes antes de freírlo”, sugiere. Si comer hígado solo no te resulta atractivo, también podrías añadírselo a un guisado de tu elección como un chilli. “La mezcla de frijoles y salsa de tomate hará que el sabor del hígado sea menos perceptible”.
También puedes disimular el sabor del hígado incorporándolo en tus recetas favoritas de boloñesa, albóndigas, pastel de carne, hamburguesas o tacos. “Ni siquiera notarás que está ahí”, asegura Matey.
¿Cuáles son otras opciones con un perfil nutricional similar?
Si no puedes soportar la idea de comer hígado, probablemente tampoco te guste la idea de probar otras vísceras. Desafortunadamente, esas serán tus mejores opciones para obtener algo con especificaciones nutricionales comparables.
Matey dice que debido al perfil denso en nutrientes del hígado, es difícil encontrar sustitutos. Dicho esto, comparte que otras vísceras rojas, como los riñones, el corazón, la lengua y las mollejas (páncreas, timo) son excelentes sustitutos con un contenido nutricional similar y un sabor más suave.
O, puedes optar por una opción a base de plantas y probar el seitán, sugiere. Está hecho de gluten de trigo e imita el componente umami del hígado de res, manteniéndose alto en proteínas.
Proteínas como los huevos, la carne y el pescado son buenas fuentes de estos nutrientes, pero no estarán tan llenos de nutrientes como el hígado. “Consumir una variedad de fuentes de proteínas garantizará que ingieras cantidades adecuadas de estos nutrientes si no deseas comer hígado”, concluye.
Vía Men’s Health UK
¿Ya te suscribiste al Newsletter de Men’s Health México y Latinoamérica?
Haz click aquí y recibe las mejores rutinas, consejos para bajar de peso, recomendaciones de salud y todo el contenido que necesitas para ser la mejor versión de ti.
Síguenos en nuestras redes sociales: Instagram, Facebook, X (Twitter) y Threads