¿Tiene “The Exorcist: Believer” una escena post créditos?
Este es el primer capítulo de una nueva trilogía impía.
“The Exorcist: Believer” está aquí para relanzar una franquicia y entregar algunos sustos de fuego y azufre al estilo antiguo en el proceso. En esta ocasión, son las mejores amigas Angela y Katherine quienes caen bajo el dominio de un demonio, desapareciendo y luego reapareciendo tres días después aparentemente cambiadas.
Al igual que lo hizo con la reciente trilogía de películas de Halloween, el director David Gordon Green desecha el canon de las secuelas, precuelas y spin-offs existentes de “El Exorcista“, optando en su lugar por hacer de “The Exorcist: Believer” una continuación directa de la película original. Y para dejar esa conexión clara, y posiblemente fomentar algo de buena voluntad tan necesaria entre los fanáticos del horror, ha traído de vuelta a Ellen Burstyn como Chris MacNeil, a quien conocimos por primera vez todos esos años atrás como la madre aterrorizada de la adolescente poseída Regan.
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Mucho parece haber cambiado para Chris desde la última vez que la vimos en 1973. Una vez una firme atea, ahora alienta a Leslie Odom Jr.’s Victor a “tener fe” si espera recuperar a Angela. Trágicamente, debido a todo lo que tuvo que pasar para salvar a su hija, ella y Regan ahora están distanciadas.
Borrar el pasado puede frustrar a algunos fanáticos de toda la vida, pero también permite que los nuevos personajes ocupen más espacio narrativo en la película, incluyendo a Ann Dowd (Hereditary) como una monja convertida en enfermera que ayuda en el exorcismo de las niñas.
“The Exorcist: Believer” es la primera película de una nueva trilogía planeada de películas que explorarán los horrores de la posesión demoníaca, por lo que, aunque esta película parece resolver su historia, la puerta al infierno sigue definitivamente entreabierta.
¿Tiene “The Exorcist: Believer” una escena después de los créditos?
A diferencia de la mayoría de las otras películas de franquicias, “Believer” no insinúa una secuela ni ofrece un último susto en forma de escena después de los créditos. Una vez que las luces en el cine se enciendan de nuevo, es seguro aflojar tu tensa sujeción al reposabrazos y levantarte de tu asiento.
Vía Men’s Health
