Cómo evitar el insomnio por estrés laboral
Nadie se ha beneficiado de llevar el estrés del trabajo al dormitorio.
¿Tu cabeza solo necesita tocar la almohada para que los pensamientos inquietantes empiecen a surgir? A nadie ha beneficiado el estrés laboral. Ya seas tu propio jefe o trabajes para una empresa con alta presión laboral, hay maneras de calmar tu mente.
Estrés laboral en el dormitorio
La alta carga de trabajo, un jefe terrible, colegas molestos, listas de tareas que nunca se completan o el miedo al fracaso: el estrés laboral juega un papel importante en nuestras vidas. Y no es sorprendente. Muchas personas pasan 40 horas a la semana en su trabajo, por lo que es más que lógico que tus pensamientos a menudo giren en torno al trabajo.
Está bien estar involucrado en tu trabajo, esto muestra que eres competente y apasionado. Pero no debe dominar tu vida. Tu descanso nocturno es tuyo, no de tu irritante jefe o tus quejumbrosos colegas.
RELACIONADA: ¿Tienes problemas para dormir debido al estrés? Esto es lo que puedes hacer al respecto
Estrés laboral vs. sueño
Que el sueño se vea afectado por cuestiones laborales también se refleja en estudios sobre la relación entre el sueño y el trabajo. Una investigación publicada en el International Journal of Behavioral Medicine constató que las altas exigencias laborales, la poca influencia en las decisiones y un alto compromiso profesional son los tres factores más importantes.
Domina el estrés
¿No pensar en el trabajo a partir de las 22:00? Es más fácil decirlo que hacerlo. ¿Y apagar tus pensamientos? Desafortunadamente, eso no se puede hacer con un botón. Hay formas de reducir el estrés, sin tener que renunciar a tu trabajo. A menos que tu trabajo te haga extremadamente infeliz, en cuyo caso es hora de reflexionar.
Mantente en movimiento
Y no, no nos referimos a dar vueltas y girar en la cama. Al moverte más durante el día, tu cuerpo y mente se relajarán mejor cuando sea hora de dormir.
Establece un momento para preocuparte
Suena extraño, pero intenta trasladar tu momento de preocupación a otro momento del día. Por ejemplo, elige dejar que tus pensamientos fluyan después de la cena y luego vuelve a dejarlos de lado. Puedes combinar esto con una caminata nocturna, lo cual aporta aún más beneficios mentales. Importante: no pongas un podcast o música durante esta caminata.
Busca la relajación
Ir a la cama con una sensación de agitación aumenta la probabilidad de preocuparse. Relájate antes de meterte entre las sábanas haciendo algo que te haga feliz. Una ducha prolongada, una larga sesión de baño o leer un libro emocionante: haz algo que te tranquilice.
Mantén el trabajo fuera del dormitorio
Aquí podemos ser breves: por favor, no envíes tus últimos correos electrónicos desde la cama. Con esto realmente llevas tu trabajo al dormitorio, lo cual es pedir problemas. Además, ese no es el único problema que surge cuando usas tu teléfono en la cama.
Escríbelo
Esto puede sonar un poco esotérico, y no necesitas comprar un diario rosa, pero durante una sesión de preocupaciones puedes intentar escribir tus pensamientos. Por ejemplo, simplemente haz una nota en tu teléfono con algunas palabras clave. Tareas que aún debes completar, decisiones que debes tomar: escríbelo y dale un lugar literal.
Levántate un momento
Dar vueltas, girar, preocuparse: puede ponerte increíblemente de mal humor si no puedes conciliar el sueño. Pero una persona frustrada lamentablemente se duerme aún menos rápido. Si realmente no puedes dormir, levántate un momento, lee un libro o haz algo que te relaje. Luego, simplemente vuelve a intentarlo.
Tu descanso nocturno es importante y, con estos consejos, puedes intentar mantener el estrés laboral fuera del dormitorio. ¡Dulces sueños!
¿Ya te suscribiste al Newsletter de Men’s Health México y Latinoamérica? Haz click aquí y recibe las mejores rutinas, consejos para bajar de peso, recomendaciones de salud y todo el contenido que necesitas para ser la mejor versión de ti.
Vía Men’s Health NL
