Beau is Afraid tiene una escena de sexo que tienes que ver para creer
Las palabras no pueden describir Beau is Afraid, pero lo intentaremos.
¿Las escenas de sexo en las películas y en la televisión son “innecesarias”? Ese es un tema que ha surgido con bastante frecuencia en los últimos meses, en lugares que van desde Tweets aleatorios que llaman la atención colectiva de Twitter, hasta ensayos en Vanity Fair e incluso hasta la boca de Quentin Tarantino (el director de Pulp Fiction dijo que “el sexo no es parte de su visión del cine” y que “es molesto rodar escenas de sexo”). Sin embargo, mientras ese discurso continúa, Ari Aster, director de las famosas películas Hereditary y Midsommar, estrenó su nueva película, Beau Is Afraid. Y claramente tiene poco interés en este tipo de argumentos, porque Beau Is Afraid presenta una de las escenas de sexo más únicas, hilarantes y, sí, esenciales de todos los tiempos.
En Beau Is Afraid, una comedia negra surrealista de tres horas, Joaquin Phoenix interpreta a Beau Wasserman, un hombre de unos 40 años que vive en lo que el público reconocerá inmediatamente como un mundo pasado por un viaje ácido (depende de nosotros decidir si queremos tomar lo que vemos como real o como la aterrada percepción de Beau de las cosas). Ha vivido toda su vida en un estado de miedo y ansiedad provocado por su madre, Mona, una CEO empresarial dominante (interpretada por Zoe Lister-Jones y Patti LuPone), y, cuando lo conocemos como adulto, está exactamente donde alguien que vive su vida en un estado constante de miedo y ansiedad probablemente debería estar: en la oficina de su terapeuta.
Hay mucho que profundizar y analizar sobre las muchas ansiedades de Beau y las señas de crecimiento personal atrofiado, pero vamos hacia esa escena de sexo. Y para llegar allí, es importante señalar una de las muchas cosas que Mona le dijo a Beau cuando era niño: su padre murió mientras lo concebía, instantáneamente, al eyacular. Su abuelo y bisabuelo, dice Mona, murieron de la misma manera. La implicación obvia es que Beau heredó este rasgo genético. Y Beau ha vivido toda su vida con esta creencia: eyacula y morirás.
Beau también vivió toda su vida “esperando” a Elaine (interpretada por Julia Antonelli como adolescente y Parker Posey como adulta), una chica que conoció, se enamoró y besó brevemente durante unas vacaciones en un crucero durante su juventud. Beau is Afraid se convierte en el camino de un héroe (usando “héroe” vagamente, porque, como señala Vox en su maravillosa reseña de la película, Beau es más inactivo que otra cosa; ciertamente no es ningún héroe) siguiendo a Beau mientras supera los muchos obstáculos en su camino de regreso a la casa de Mona para su funeral; le dicen, en un momento impactante, que su cabeza fue aplastada en el vestíbulo de su casa por un candil de techo.
De nuevo, esta es una película de tres horas. Y hay muchos obstáculos en el camino de Beau a casa que ocupan gran parte de ese tiempo. Finalmente, llega a casa tarde, perdiéndose el funeral. Se perdió la multitud, se perdió la comida, se perdió todo. Su viaje ha sido largo, y se desploma en el sofá de su madre después de revivir sus muchos, muchos, muchos recuerdos juntos. Estos dos han tenido una relación única y problemática, por decir lo menos.
Pero no es el único que llega tarde. Lo despierta de su siesta en el sofá una visitante tardía: Elaine, que trabajaba para la megaempresa de Mona. Ambas partes se recuerdan; Elaine luciendo arreglada y hermosa, Beau no tanto. No importa, porque su antigua conexión está instantáneamente presente, y poco después se besan, abrazan y deciden dirigirse al dormitorio de Mona.
Y así comienza la escena de sexo. Y dado lo que nos han contado, estamos llenos de la misma angustia que Beau. ¿Va a seguir adelante? Si lo hace, ¿va a morir? Beau se demora en este momento como lo haría cualquier persona con ansiedad que no haya hecho esto antes, y Elaine está lista para empezar, como cualquier persona con algo de experiencia lo estaría. Y luego ella decide poner el ambiente adecuado y pone “Always Be My Baby” de Mariah Carey en su teléfono, a través de Spotify.
Aquí obtenemos, simplemente, una de las combinaciones más únicas de increíble comedia física e innegable angustia que se hayan visto en el cine, mientras Elaine y Beau comienzan su momento de intimidad. Posey y Phoenix han demostrado ser comediantes increíblemente talentosos en la pantalla en el pasado, pero esta escena está en un nivel diferente; la banda sonora de Mariah Carey solo hace las cosas aún mejores. Es absurdo. Es completamente absurdo.
Cuando Beau comienza a llegar al clímax -está en sus cuarenta y tantos años y presumiblemente nunca se “ha hecho justicia por su propia mano”, según lo que su madre le dijo sobre el lado de su padre de la familia-, la escena cambia a un tono indudablemente cómico.
Terminan (después de un comentario de Elaine sobre cómo Beau tuvo suficiente fuerza para romper el condón que ella le dio), y Beau está tan feliz y libre de preocupaciones como no se le ve casi nunca en los 180 minutos de película, y es un momento fugaz que no dura mucho. Él está pensando lo que todos estábamos pensando: va a morir. Lo dice en voz alta a Elaine, que no responde. No responde porque, verás, lo que sea que haya tenido Beau, de alguna manera se transfirió a ella. Ella está muerta, congelada con algo que se asemeja a una rigidez cadavérica instantánea. Y la madre de Beau, que no está muerta, sorprendentemente, ha estado observando desde las sombras todo el tiempo.
Esto es Ari Aster en su máxima expresión; convierte un momento de comedia oscura, alegría y humor en un horror verdaderamente surrealista y extraño. Y como todo en Beau Is Afraid, todo se remonta a la ansiedad que proviene de problemas no resueltos de la juventud. Beau nunca estuvo a la altura de su madre; escuchar lo que ella le decía toda su vida no le sirvió de nada, y hacer lo contrario de lo que ella le decía empeoraba las cosas aún más.
El resto de Beau Is Afraid, después de esta escena de sexo, se convierte en varios giros importantes: muchas personas y situaciones que hemos visto hasta este punto no son exactamente quienes dicen ser, y todo tiene que ver con la fascinación de Aster por la relación Beau-Mona.
Casi inmediatamente después de la entrada de Mona en escena (interpretada aquí por LuPone), el cadáver congelado de Elaine es arrastrado fuera de la habitación, presumiblemente para ser desechado como un mueble viejo. Beau Is Afraid es una película metafórica y a veces enigmática, pero esta no es difícil de interpretar: el problema central de Beau, nunca fue sus relaciones románticas (o la falta de ellas). Fue su madre.
Aquí, Aster hizo una película que puede ser discutida después de verla probablemente el mismo tiempo que dura la película en sí. Y con lo abstracta y extraña que es, la película ciertamente no será para todos. Pero cualquiera que haya visto su otro trabajo (el horror enfocado en la familia de Hereditary y el horror enfocado en las relaciones románticas de Midsommar) debería poder conectarse rápidamente con su forma de pensar y ver que, aunque esto es más como After Hours o Eyes Wide Shut con una gran dosis de angustia existencial, es el siguiente paso lógico para un hombre que anhela encontrar el terror en relaciones con las que casi cualquier persona puede identificarse.
Claramente, necesitaba una escena de sexo para lograr ese punto; esta escena fue sin duda necesaria para Beau Is Afraid. ¿Necesitaba Mariah Carey estar involucrada? ¡No! ¿Hizo que la escena fuera increíblemente única e inolvidable? Sí, sin duda. Y a veces las mejores partes de las películas no son solo cosas que están ahí para servir a la trama o para marcar una casilla. A veces se trata de crear recuerdos y momentos especiales que la gente recordará.
Si quieres hacer una película sobre la que la gente estará hablando durante mucho tiempo, son momentos como ese los que son realmente necesarios.
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Vía Men’s Health