Por estas razones, tal vez tengas que orinar con más frecuencia

Acabas de ir al baño y, media hora después, ya tienes que volver. Los problemas al orinar no solo son muy molestos (por ejemplo, cuando estás en la carretera), sino que también pueden ponerte nervioso. ¿Tienes algún problema con tu vejiga? ¿O será que tu cuerpo empieza a deteriorarse de verdad? Antes de que cunda el pánico, mencionamos algunas costumbres que podrían ser la causa de tu problema para orinar.

Orinar demasiado frecuentemente

Primero que nada: si realmente tienes que ir al baño con mucha frecuencia o sientes dolor al orinar, siempre consulta a un médico. Para los hombres, es normal orinar de cuatro a ocho veces al día, dependiendo de factores como la ingesta de líquidos y la actividad física. La frecuencia para orinar suele aumentar con la edad, y estas visitas al baño suelen ocurrir durante la noche.

Sin embargo, si notas que superas esas cuatro a ocho veces, es posible que algunos factores en tu rutina diaria estén provocando que visites el baño más de lo habitual. Es momento de descartar lo siguiente:

1. Tomas demasiado café

Tu día consiste en consumir café para mantenerte despierto. Sin embargo, estimularte con café no es muy amable con tu vejiga. La cafeína puede irritarla y hacer que vayas al baño con más frecuencia. No está comprobado que la cafeína sea la causa de tu problema, pero vale la pena probar. Omite algunas tazas innecesarias o cámbialas por una versión descafeinada.

2. Comes demasiado picante

Si pones salsa picante en cada platillo de arroz y casi le echas hojuelas de chile a las papas hervidas, estás acostumbrado a la comida picante. Aunque es deliciosa, modera un poco el uso de esas hojuelas. Los alimentos picantes pueden irritar la pared de la vejiga, lo que eventualmente conduce a una mayor frecuencia para orinar. Esto no significa que debas comer comida insípida; existen muchas otras especias (que no son picantes) para darle sabor a tus platos.

3. Consumes mucha sal

Al igual que el chile, la sal es un condimento que se usa mucho. La sal no es del todo mala; ayuda a que el cuerpo funcione, pero no hay que exagerar. Una dieta alta en sal puede hacer que tu cuerpo retenga más líquidos, lo que aumenta la presión en la vejiga y te hace orinar con más frecuencia y urgencia.

¿La solución? Consumir menos sal. Y no solo se trata de usar menos el salero, también es recomendable revisar las etiquetas de los productos. En muchos sazonadores, como los de pollo, ya hay una cantidad considerable de sal que muchos desconocen.

4. Bebes demasiado alcohol

Tal vez sea obvio, pero no está de más mencionarlo. Beber alcohol con frecuencia no le hace bien a tu vejiga. En realidad, el alcohol no beneficia en nada a tu cuerpo, pero eso ya lo sabes.

El alcohol puede aumentar la producción de orina y provocar que orines más seguido; además, puede irritar la pared de la vejiga. Y cuando la vejiga se irrita, te lleva a ir al baño con más frecuencia.

Vía Men’s Health NL

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