Mejor manera de cumplir tus Propósitos de Año Nuevo
Nada de palabras vacías, ¡manos a la obra!
El nuevo año casi está aquí, y las habituales listas de propósitos de Año Nuevo vuelven a la mesa. Lamentablemente, el dicho “las promesas están hechas para romperse” a menudo resulta cierto cuando se trata de hacer (y romper) propósitos de Año Nuevo. Las investigaciones muestran que hasta el 46% de las personas que hicieron propósitos de Año Nuevo terminan arrojándolos a la basura.
¿Por qué sucede esto?
En primer lugar, enero podría no ser el mes adecuado para comenzar con tus propósitos de Año Nuevo. El día más deprimente del año, Blue Monday, no cae en esta fecha por casualidad. ¿Cuándo es el mejor momento para comenzar entonces? En agosto, después de tus bien merecidas vacaciones. Después de unas vacaciones, necesitas adaptarte a nuevas rutinas, lo que lo convierte en el momento perfecto para algunos propósitos. Pero, por supuesto, eso no te ayuda ahora.
Este no es el único obstáculo. Para muchos “propositivos”, a menudo es todo o nada. Con propósitos pequeños, alcanzables y realistas, tienes una mayor probabilidad de éxito y te mantienes motivado por la satisfacción que obtienes de tus éxitos. Un propósito difícil de lograr tendrá el efecto contrario.
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Entonces, ¿cómo logras mantenerlos?
Sé realista: Haz que tus metas sean concretas y realistas. Entonces, no: “Quiero dejar de comer carne el próximo año”. Sino: “El próximo año, dejaré de comer carne todos los lunes”.
Persiste: Si las cosas están un poco difíciles, pregúntate a ti mismo por qué lo estás haciendo en primer lugar. Esto mantendrá tu motivación alta y te ayudará a mantenerte enfocado.
Duerme lo suficiente: Según Kelly McGronigal de la Universidad de Stanford, la falta de sueño obstaculiza tu fuerza de voluntad. Cuando duermes poco, se ve afectado el funcionamiento de la corteza prefrontal, la parte de tu cerebro involucrada en la planificación, el control de impulsos y la toma de decisiones.
¡Manos a la obra!: Este lema puede sonar un poco trillado, pero es así de simple. Nada de palabras vacías, ¡toma acción!
Vía Men’s Health NL
