¿Quieres probar el rimming? Todo lo que necesitas saber sobre el sexo oral anal
Expertos explican cómo hacerlo y lo placentero que puede ser.
Las prácticas sexuales anales han llegado oficialmente al mainstream. Y no hablamos solo de la penetración anal; los butt plugs, beads y otros juguetes sexuales han introducido nuevas formas de experimentar con la zona posterior. Pero si apenas estás explorando el juego anal, ¿qué tal si pruebas el rimming? Aquí no hay riesgo de dolor o incomodidad potencial ya que no se requiere penetración. Algunos dirían que es el nuevo oral.
El rimming, también conocido como anilingus, básicamente consiste en usar la lengua y los labios para dar placer al ano de tu pareja. Según la Dra. Kristie Overstreet, psicoterapeuta y sexóloga clínica, el término se debe a que los bordes externos del ano, también conocidos como el borde, son a menudo una área focal de estimulación. Pero aquí el cielo es el límite, amigos: el rimming también puede involucrar girar la lengua directamente en el ano, penetrarlo o simplemente besarlo y lamerlo alrededor.
¿Por qué alguien querría probar el rimming, además de la novedad que supone? Tu trasero está lleno de terminaciones nerviosas súper sensibles, lo cual explica por qué se siente tan bien para muchas personas.
“Las sensaciones son indescriptibles”, dice el Dr. Evan Goldstein, autor de Butt Seriously: The Definitive Guide to Anal Health, Pleasure, and Everything In Between.
Hace años, el rimming podría haber sido considerado una rareza poco común, pero eso ya no es el caso. Una encuesta de 2019 a más de 700 adultos heterosexuales encontró que casi el 27% de las mujeres y el 13% de los hombres habían recibido rimming en los últimos tres meses, y ten en cuenta que esos son solo los participantes que se sintieron cómodos informando sobre sus actividades anales.
Considerado muy controversial cuando se mostró en el piloto de Queer as Folk en el 2000, el rimming ha ido apareciendo más en la cultura pop a lo largo de los años, la señal definitiva de que una tendencia ya no es marginal. Más recientemente, ¿quién podría olvidar esa escena de White Lotus donde un invitado sorprende al gerente del hotel en pleno acto con uno de sus empleados? ¿Sabes, esa escena que rompió Internet?
Lukas Gage, el actor que interpretó al receptor de anilingus en la escena mencionada de White Lotus, dijo en una entrevista con Andy Cohen: “Creo que se necesita hablar más del rimming”. Y no podríamos estar más de acuerdo.
Pero antes de lanzarte de cabeza (literalmente), repasemos algunos de los conceptos básicos, ¿de acuerdo?
¿Puedes contraer una ITS (infección de transmisión sexual) por rimming?
Es posible. La hepatitis A, el herpes, el VPH, la sífilis y la gonorrea pueden transmitirse a través del rimming, dice Goldstein. La hepatitis A se transmite directamente a través de las heces, mientras que la sífilis, el VPH (verrugas genitales) y el herpes se transmiten por contacto piel con piel, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC). Aunque el herpes generalmente se encuentra en la boca o los genitales, también puede aparecer en la parte baja de la espalda y las nalgas, conocido como herpes sacral. La gonorrea oral también puede transmitirse por rimming.
Hay algunas cosas que puedes hacer para reducir la probabilidad de transmisión de ITS durante el rimming. Primero, mantente atento a cortes o abrasiones en la lengua, labios, encías o recto. Estos cortes pueden convertirse en puntos de entrada para infecciones y transmisión, según los CDC.
Segundo, está la opción de usar un dique dental, dice Goldstein. Los diques dentales son láminas delgadas de látex o poliuretano que se utilizan entre la boca y la vagina o el ano durante el sexo oral. No son tan fáciles de encontrar en las tiendas locales como los condones, pero puedes conseguirlos en línea.
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¿Y qué hay de las bacterias de las heces?
“Puedes contraer infecciones bacterianas como E.coli y salmonela por el rimming”, dice Goldstein. “La Giardia, un parásito microscópico que se transmite a través de las heces, y otros parásitos también pueden transmitirse por rimming”.
Afortunadamente, esto es bastante fácil de prevenir. La clave es lavar bien el área alrededor del ano con agua y jabón. ¡Pero asegúrate de usar jabón antibacteriano! Además, “evita el rimming si tú o tu pareja han estado enfermos o presentan síntomas de un posible virus estomacal”, dice Goldstein. Esto se debe a que las bacterias “malas” generalmente provienen de alimentos contaminados, y la mayoría de las personas experimentan diarrea o dolor de estómago después de ingerirlos. Así que si el estómago de tu pareja está molesto, es más probable que te transmita bacterias malas a través del rimming.
Contrariamente a la creencia popular, no necesitas ducharte o hacerte un enema para prepararte para el rimming. “Hacerse un enema es típicamente para juegos que van un poco más profundo”, dice Alicia Sinclair, sexóloga clínica y directora ejecutiva de la compañía de juguetes sexuales b-Vibe. Cuando haces rimming, no penetras el ano. Estás lamiendo el ano externo, en su mayor parte. (Tal vez puedas introducirte un centímetro dentro del ano con la lengua, pero eso es realmente todo). Así que un enema no es necesario como lo sería si vas a ser penetrado con un pene o dildo.
¿Cómo debo prepararme para mi primera vez haciendo rimming?
Aclaremos algo desde el principio: antes de poner tu lengua o boca en el trasero de alguien, tienes que pedir el consentimiento de tu pareja. Asegúrate de que tanto tú como tu pareja estén de acuerdo en probar esto. “Poder confiar en tu pareja y hablar sobre lo que se siente bien o no hace una gran diferencia en la experiencia”, dice Overstreet.
Si bajas sin preguntarle a tu pareja si está bien antes, no será divertido para nadie. Incluso podría ser traumático para ella. “El shock o la incomodidad también hacen que los músculos anales se tensen, lo que significa menos placer para todas las partes involucradas”, advierte Sinclair.
Una vez que tu pareja te haya dado el visto bueno (o tú le hayas dado el visto bueno a tu pareja), puedes simplemente incorporarlo en tu sesión sexual regular. “Si eres el receptor, puedes pedirle a tu pareja mientras te da sexo oral [o una masturbación] que retroceda y estimule la área anal”, sugiere Overstreet.
Sinclair sugiere estimular tu propio ano para acostumbrarte a la sensación de antemano. Es importante descubrir qué puede sentirse bien para ti. Puedes hacer esto usando tus dedos o con un pequeño juguete anal. Asegúrate de usar mucho lubricante.
¿Cómo le hago un rimming a alguien?
Tal vez te estés preguntando: bien, ¿cómo lamo este trasero ahora que estoy aquí abajo? Comienza tratando de poner a tu pareja a gusto, dice Sinclair. “Masajea alrededor del trasero un poco, avanzando lentamente hacia el ano con movimientos suaves”, dice. Esto les ayudará a relajarse.
Sinclair dice que una de las mejores técnicas de anilingus es “girar la punta de la lengua en círculos alrededor de la abertura”, dice. “También puedes mover la punta de la lengua arriba y abajo justo sobre la abertura”. Otro consejo: prueba suavizar la lengua y lamer de arriba abajo todo el ano, “como si estuvieras comiendo un cono de helado”.
De nuevo, comunica con tu pareja sobre lo que se siente bien y lo que no, y siempre escucha el cuerpo de tu pareja. “Cuando el receptor se excita más, o cuando encuentras un movimiento que realmente funciona para ellos, puedes notar que el ano se relaja y se expande un poco”, dice Overstreet. Esto es una buena señal. Significa que el cuerpo está respondiendo positivamente al placer.
Si eres el receptor, ofrece retroalimentación sobre lo que se siente bien para ti. Overstreet dice que respires en tu cuerpo, te concentres en el placer e intentes relajarte tanto como sea posible.
Si descubres que te gusta, ¡adelante y experimenta! Prueba el rimming acostado de espaldas, o tal vez prueba el facesitting. No tengas miedo de aventurarte en nuevos territorios. El sexo es divertido y todos deberíamos ser un poco creativos de vez en cuando. De lo contrario, ¿cuál es el punto?
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Vía Men’s Health