El poder de las comunidades
¿Sientes que te invade el tedio? ¿No encuentras nada que te emocione? Aquí podría estar la respuesta.
Recuerdo la primera vez que escuche a The Grateful Dead con verdadera atención. Claro, los había escuchado antes de la pandemia, pero fue a mediados de marzo de 2020, mientras me encontraba en el Desierto de Mojave, que escuché “Sugaree” en la versión en vivo de agosto de 1972. Esa canción dio lugar a una aventura que va más allá de lo acústico para mí. Gracias a ella, conocí a un grupo de personas al que le he tomado cariño, individuos con los que he conversado y junto a los que me he parado en conciertos: los “Deadheads”.
Comunidad y pertenencia. Son dos cosas que no podemos obtener por nuestra cuenta. Necesitamos interactuar con otros y unirnos en torno a algo más grande que nosotros mismos para experimentarlas. Hay aficionados al deporte; seguidores de figuras políticas; amantes de la cultura nerd… Hay muchas formas en las que se expresa la condición de fanático. Y ahora más que nunca, tener un sentido de comunidad es esencial. La modernidad ha traído consigo una epidemia de soledad y aislamiento. Ahora puedes conseguir todo lo que deseas sin tener que interactuar con otras personas y eso, aunque conveniente, no es ideal. Un equipo de investigadores analizó este tema recientemente y concluyó que “la ausencia de pertenencia está asociada con consecuencias negativas, incluidas una salud mental pobre y poca resiliencia”. Brianne Kothari, Ph.D., investigadora de Oregon State University me dijo al respecto que “la depresión y el aislamiento son problemas graves actualmente”. Ella recién ha completado un estudio llamado “Community Belonging Measurement Project”. “Creo que pensar en cómo cultivamos las conexiones con otros y cómo hacemos que las personas sientan como que pertenecen es algo crítico”, dice.
Para mí, esto sucedió a través de “The Dead”. Comenzó con ese disco de 1972, pero después pasé mucho tiempo escuchando otras producciones, notando sutiles diferencias de estilo con el paso de los años. Luego, empecé a visitar foros en línea relacionados con la banda. Eventualmente, empecé a opinar también. A diferencia de gran parte de lo que encuentras en internet, estos foros no estaban repletos de agresión y conversaciones tóxicas. Eran más bien sitios donde personas con intereses comunes podían reunirse y conversar.
Eventualmente, acudí a presentaciones en vivo de Dead & Company, la versión actual de la banda, en la cual se encuentran algunos miembros originales, así como John Mayer en el rol de Jerry García. Parado ahí, escuchando, comencé a reconocer a los otros asistentes como “mi gente”. Tuve una larga conversación con un tipo llamado Dave de 65 años, un vendedor de seguros retirado que se sentó junto a mí en un show en Las Vegas. Era como si nos conociéramos de años. Esto a pesar de que nunca nos habíamos visto.
En otros conciertos, me paraba junto a otros espectadores e intentábamos adivinar qué canción tocarían a continuación. Durante los momentos muertos, contábamos chistes y anécdotas. Las investigaciones muestran que somos cinco veces más propensos a reír si estamos con otros que si estamos solos, y es algo que yo he experimentado. Algunos eran hippies jóvenes con pelo largo y olor a patchouli. Otros portaban camisas teñidas acompañadas de un Rolex. Todos eran distintos, pero en ese momento y en ese espacio, los unía el hecho de ser Deadheads.
Kothari me explicó que reunirse con otros es clave para sentir que pertenecemos. Eventualmente, debemos dejar el internet y hacer cosas en el mundo real. “Las personas desean conexiones cara a cara”. A la sensación de euforia que experimentamos al estar con otros se le conoce como “efervescencia colectiva”. El término fue acuñado por el legendario sociólogo Émile Durkheim. El investigador Adam Grant, Ph.D., lo ha descrito como “la sensación de energía y armonía que sienten las personas cuando se reúnen en grupo alrededor de un propósito común”.
La buena noticia, para todos aquellos que no sienten deseos de pararse junto a un montón de Deadheads durante una interpretación de 33 minutos de “Dark Star” es que puedes encontrar efervescencia colectiva en un concierto, un evento deportivo o cualquier otra cosa. El punto es que te comprometas con una causa y te reúnas con otros que la comparten. De ahí viene el sentido de pertenencia.
Cuatro tácticas para experimentar efervescencia colectiva
Encuentra algo, lo que sea
Pero idealmente debe ser algo que te brinde alegría. Identifica algo que te emocione profundamente. Entra a un programa de voluntariado, empieza a jugar pádel, ve los partidos de tu equipo favorito en un bar lleno de otros fanáticos o únete a un club de lectura. “Las bibliotecas son sitos importantes para generar comunidad, de acuerdo con nuestro estudio”, dice Kothari. “Y también las escuelas para los padres de los niños”.
Conéctate
El internet no tiene que ser una fuente de estrés y ansiedad. De hecho, puede producir lo contrario. “Una de las cosas que hallamos es que algunas comunidades crecen en línea”, explica Kothari. Así que ve y únete a una cadena de Reddit, un grupo de Facebook o algún otro sitio por el estilo. Participa. Haz preguntas. Crea amistades. Muchos de estos grupos tienen ocasiones en las que se reúnen en vivo también.
Desconéctate
Un paso importante para pertenecer es simple y sencillamente presentarse. La mejor forma de lidiar con cualquier tipo de pena o incomodidad es hacer preguntas. “Si llegas con curiosidad y buena actitud, verás que las preguntas conducen a otras preguntas y luego a conexiones y amistades. Es la mejor forma de conectar con otros”. Es por eso que ser fanático de un equipo es tan reconfortante. Hay temas y una historia común de inmediato. Si el equipo gana, todos celebran. Si pierde, todos se lamentan.
Da la bienvenida a otros
La importancia de ser incluyente suena como algo de lo que te hablaría el departamento de recursos humanos de tu empresa, pero en verdad importa. En el proyecto de Kothari encontraron que la forma de expresarse, cuando es abierta y amable con los demás, resulta clave para crear comunidad. Sé abierto y generoso. Y quizá lo mejor será evitar hablar de política, a menos que esa sea la naturaleza del grupo en el que te encuentras. En ese caso, adelante.
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