El verano del actor de Hollywood maduro
Los grandes estrenos de la temporada tienen algo en común: hombres mayores de 50 años pateando traseros.
Una cosa que he aprendido sobre mí mismo, mientras me acerco a la mediana edad, es que me gusta ver a actores mayores que yo haciendo como que golpean a villanos y salvan al mundo. La buena noticia es que la oferta de este tipo de producciones es mayor que nunca. La fórmula es simple: un hombre maduro que lleva una vida tranquila es obligado por las circunstancias a utilizar sus habilidades para darle una lección a quienes han cometido el error de subestimarlo. Todo comienza cuando algún despistado se comporta de forma cruel o agresiva con alguien y lanza un reto a nuestro héroe de buenos modales: “¿Qué vas a hacer al respecto, abuelo?”. El veterano procede a demostrar todo lo que aprendió en las fuerzas especiales o en la mafia bielorrusa. Taken, la cinta que transformó la carrera de Liam Neeson en 2008, y sus dos secuelas, son el mejor ejemplo de este subgénero, junto con The Grey, una película de 2011 en la que Neeson se amarra botellas rotas a los nudillos para enfrentarse a golpes con una manada de lobos. Desde entonces, todos sus contemporáneos, y algunos mayores que él, han entrado al juego, desde Jackie Chan y Jean-Claude Van Damme hasta Jeff Bridges (The Old Man) y Bob Odenkirk (Nobody). Incluso Denzel Washington ha aparecido en un par de películas del estilo y lo hará una vez más este año con The Equalizer 3. Un vistazo a las carteleras demuestra que estamos viviendo la era de los héroes de acción veteranos. Jason Momoa, de 43, y Vin Diesel, de 55, aparecen en la recientemente estrenada Fast X. Con 58 años, Keanu Reeves da vida, por cuarta ocasión, a John Wick. Cuando se estrene la que supuestamente será la penúltima Mission: Impossible, Tom Cruise tendrá 61. Y, por supuesto, está Indiana Jones and the Dial of Destiny, en la que Harrison Ford volverá a usar su látigo a los 80 años. Por otro lado, en Instagram puedes ver a Hugh Jackman, de 54 años, ganando de vuelta el músculo necesario para interpretar a Wolverine en Deadpool III, cinta en la que coincidirá con el también increíblemente fit Ryan Reynolds de 46.
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EL ASCENSO DEL HÉROE VETERANO
Lo que nos permiten las cintas de acción es imaginarnos haciendo algo que jamás seríamos capaces de hacer en la vida real, como estrellar un auto de varios millones contra un helicóptero o decir una frase trillada pero contundente justo después de lanzar a un villano desde un edificio. Pero para aquellos que crecieron, y luego comenzaron a envejecer, viendo a Cruise y Reeves, el subgénero del héroe de acción veterano se trata de más que sólo fantasías de acción, es algo que nos recuerda que nuestros cuerpos aún tienen mucho por dar y que, si la situación lo requiere, nosotros también podríamos encontrar el valor de arriesgarlo todo por un ideal, que nuestro dolor de espalda baja y rodillas que truenan no nos definen.
Hace un tiempo, no era común ver a cincuentones repartiendo patadas, y cuando ocurría no era algo que pudieras disfrutar. Roger Moore cumplió 57 mientras filmaba su séptima aparición como James Bond en A View to a Kill. Y, a pesar del apoyo de varios dobles de acción, un soundtrack épico cortesía de Duran Duran y una gran interpretación de parte de Grace Jones como May Day, se considera una de las peores cintas de Bond. Con la excepción de Clint Eastwood, quien tenía 55, y Charles Bronson, de 64, las grandes estrellas de acción en 1985 eran considerablemente más jóvenes que Moore. Chuck Norris tenía 45; Harrison Ford 43; Michael Douglas 41; Sylvester Stallone 39; Arnold Schwarzenegger 38; Mel Gibson 29 y Eddie Murphy 24. Pero el gran problema no era que Moore tuviera 57, sino que se veía como que tenía esa edad. Lucía cansado y cada vez que compartía escena con Tanya Roberts, la Bond girl, parecía su tío. El mismo Moore sabía que era algo extraño y decidió renunciar al papel después de esa cinta.
Pero algo inesperado ha ocurrido en las décadas recientes. La edad promedio de los protagonistas masculinos en Hollywood se ha incrementado año con año. El medio siglo ya no es la línea que divide a los jóvenes de los viejos, y tampoco lo son los 60. Esto es especialmente cierto cuando hablamos de actores, individuos que tienen acceso a lo más avanzado en entrenamiento y nutrición, además de las mejores cirugías que el dinero puede comprar y el poder del CGI.
¿CUÁL EDAD DE RETIRO?
Parte de la razón por la que Cruise, Reeves y su colegas aún no han dejado atrás estos papeles es que no tienen que hacerlo. Además de que no está del todo claro qué sigue para ellos una vez que los balazos y persecuciones queden atrás. Los hombres no son completamente inmunes a las consideraciones de edad en el cine. “Sean Connery siguió actuando durante 40 años sin tener que estar haciendo escenas de riesgo a los 60”, afirma el columnista veterano, Richard Rushfield, de The Ankler. “Había un concepto de respetabilidad que venía con la edad. Creo que ahora, si no puedes continuar con las escenas de acción es como si estuvieras muerto. Nadie quiere interpretar a un padre de familia o, peor aún, a un abuelo”.
Pero la razón principal por la que estos actores continúan en el mismo camino es que el negocio no los deja escapar. Ford, Cruise y Reeves (e incluso Diesel) son reliquias de tiempos en los que todo el mundo consumía el mismo entretenimiento y las audiencias estaban de acuerdo en quién era una estrella y quién no. “Alrededor del momento en que se inventó el iPhone, empezó a desaparecer ese concepto de estrella”, dice Rushfield. Quizá Michael B. Jordan o Simu Liu tengan el talento y carisma para ser los siguientes Neeson o Jackman, pero Hollywood ya no provee el tipo de producciones que podrían llevarlos ahí. Una película de superhéroes puede volverte famoso, pero no te convertirá en un fenómeno como Cruise o Reeves, cuya fama trasciende los proyectos individuales. Interpretar a un superhéroe de Marvel se parece más a ser uno de los muchos protagonistas de una serie de TV que a hacer Top Gun. A los estudios les quedan dos opciones: enfocarse en los superhéroes, en donde la verdadera estrella es Spiderman, y no quien lo interpreta, o apegarse a lo que hacían antes.
En tanto continúe siendo así, cualquiera que quiera hacer una cinta de acción con un héroe en sus cincuentas debería tomar como ejemplo a esas películas en las que la edad del protagonista es algo de lo que se toma ventaja, y no algo que se ignora. “El error”, de acuerdo con el director James Mangold, quien habló con The Hollywood Reporter, “es cuando el protagonista ya es alguien maduro pero en toda la película se hace un esfuerzo por hacer como que esto no es cierto”.
Un ejemplo de cómo abordar la cuestión de buena manera es lo que ha hecho Keanu Reeves. Estaba a punto de cumplir 50 cuando aceptó el papel de John Wick, el cual estaba pensado para alguien mayor. Ahora, tiene 60 y continúa haciéndolo. Las películas funcionan porque él es bueno, pero también porque ofrecen una reflexión en cuanto al dilema del envejecimiento. Cuentan la historia de un hombre que es muy bueno para una cosa, y aquellas fuerzas que le impiden dejar de hacerla.
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Frases acerca de envejecer que no pasan de moda.
La gente envejece, nadie es invencible por siempre en este mundo
-Ip Man (Donnie Yen), Ip Man
Estoy demasiado viejo para esto
Roger Murtaugh (Danny Glover), Lethal Weapon
Estoy viejo, no obsoleto
T-800 “Abuelo” (Arnold Schwarzenegger), Terminator Genisys
Algo no es hermoso porque tenga que durar
Visión (Paul Bettany), Avengers: The Age of Ultron
Mientras más envejezco, más cosas tengo que dejar ir. Así es la vida
Rocky Balboa (Sylvester Stallone), Rocky Balboa
Este artículo salió publicado en la edición julio/agosto de Men’s Health México y Latinoamérica