Swinging: lo que debes saber antes de practicarlo
Cada vez más parejas lo practican, más de lo que imaginas.
A medida que la no monogamia ética (ENM, por sus siglas en inglés) gana popularidad en la cultura actual, también lo hace el swinging. Probablemente has bromeado sobre piñas al revés o sobre Secret Life of Mormon Wives, pero detrás de estos símbolos hay mucho más.
El swinging puede ser tanto una práctica de relación como una identidad: donde uno o ambos miembros de la pareja tienen múltiples parejas casuales fuera de su relación, explica Zhana Vrangalova, PhD, experta en sexualidad y relaciones. Tal vez es algo que te gustaría probar.
Pero antes de reservar tu primer crucero de swingers (sí, existen), es importante que conozcas los matices de esta práctica. Aquí lo que debes saber.
¿Qué es el swinging?
“Conductualmente, [el swinging] significa que estás en pareja, o eres una persona soltera, que lleva una vida con múltiples parejas sexuales casuales”, dice Vrangalova. Para la mayoría de las parejas que lo practican, experimentan estas aventuras sexuales “juntos como pareja, y lo hacen con cierta frecuencia”, añade. Por ejemplo: una vez al mes, tú y tu pareja se reúnen con otra pareja para un encuentro sin compromiso; o una vez al año, asisten a un resort swinger durante una semana.
Quienes practican el swinging pueden encontrar parejas en aplicaciones, eventos sociales, clubes o fiestas sexuales, e incluso en cruceros diseñados para estas experiencias.
Se convierte en identidad cuando las personas “adoptan esta etiqueta para sí mismas y sienten que forman parte de la comunidad swinger, o de lo que a menudo se llama Lifestyle”, señala Vrangalova.
Aunque el comportamiento está en auge, Vrangalova ha notado un descenso en quienes se identifican como “swingers”. “El término ha perdido popularidad. Las generaciones más jóvenes se identifican más con la poliamoría, pero es algo distinto y debe mantenerse separado”.
¿En qué se diferencia el swinging de otras formas de no monogamia?
El swinging suele confundirse con las relaciones abiertas y la poliamoría. Si bien todos son tipos de no monogamia, difieren en el grado de exclusividad emocional (o únicamente sexual) y en si las parejas juegan juntas o por separado.
La mayor diferencia es que los swingers tienen una única relación romántica comprometida, mientras que la poliamoría implica varias relaciones amorosas simultáneas. “Es un fenómeno muy distinto”, aclara Vrangalova. Una pareja swinger puede intercambiar parejas con otros cada fin de semana, pero mantienen la exclusividad emocional entre ellos. (“Soft swap” y “full swap” son términos usados para diferenciar encuentros sin y con penetración vaginal, respectivamente).
El swinging también se distingue de una relación abierta, donde cada miembro de la pareja tiene sus propias experiencias sexuales por separado. “Los swingers juegan principalmente juntos, mientras que en relaciones abiertas suelen hacerlo por separado”, afirma Vrangalova.
Vía Men’s Health
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