¿Es posible tener una relación exitosa si tú y tu pareja son muy diferentes?

Desde una discusión sobre un punto de vista político hasta no ponerse de acuerdo sobre la planificación del fin de semana: puede que tú y tu pareja sean totalmente diferentes. Pero, ¿es eso malo? ¿Y qué significan esas diferencias a largo plazo para tu relación?

¿Es malo tener una diferencia de opinión?

Vamos directo al grano: no, no es malo tener una opinión diferente. Es una parte natural de cualquier relación. Incluso puede ser positivo, ya que la opinión del otro te mantiene alerta y te puede ofrecer nuevas perspectivas que no habías considerado.

Esto suena bien, pero si sus diferencias de opinión siempre terminan escalando en una discusión, la situación puede volverse menos agradable. Especialmente si no expresan esos desacuerdos, lo que puede llevar a una relación en la que ambos empiecen a irritarse mutuamente.

¿Cuál es el enfoque correcto?

Tener una diferencia de opinión de vez en cuando no es malo. Pero, ¿cómo evitas que se convierta en una relación llena de discusiones? La respuesta: usa la comunicación adecuada. Durante el próximo desacuerdo, trata de seguir estos consejos:

Escucha (de verdad)

Algunas personas están tan convencidas de su punto de vista que en realidad no escuchan lo que la otra persona tiene que decir. Dale espacio a tu pareja para que comparta su punto de vista, sin interrumpir.

Mantén la calma

Explotar de inmediato solo porque la otra persona no comparte tu opinión no tiene sentido. Trata de evitar una reacción emocional antes de que empiecen a volar platos por el aire.

Busca similitudes

En lugar de enfocarte en las cosas en las que no están de acuerdo, intenta encontrar puntos en común. Busca temas en los que sí coincidan.

Compromiso

Si tú y tu pareja son tercos, puede ser difícil, pero no imposible, llegar a un punto de acuerdo. Estén dispuestos a considerar ambos puntos de vista y busquen soluciones que sean aceptables para ambos.

Enfócate en el problema

Un punto importante: enfócate en el problema, no en tu pareja. Concéntrate en el tema específico y no en el hecho de que ustedes dos otra vez no están de acuerdo. Peor aún, no saques a relucir problemas pasados.

Encuentra un equilibrio saludable

Si tu pareja solo dice “sí” a todo, esto puede terminar molestándote. Tener desacuerdos es esencial para una relación saludable, ya que cada uno tiene su propia perspectiva y debe poder compartirla.

Sin embargo, hay límites. Si los desacuerdos llevan a constantes problemas, discusiones, peleas y a un ambiente negativo, puede que sea necesario revisar tu relación. Habla con tu pareja sobre la cantidad de discusiones y traten de descubrir juntos si todavía son compatibles. Doloroso, pero es la solución correcta.

Vía Men’s Health NL

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