Algunas personas dicen que es solo una leyenda urbana. Otras aseguran que les resulta fácil. Y otras—bueno, simplemente piensan que es increíble. Sí, estamos hablando de la eyaculación femenina, también conocida como squirting. Ya sea que hayas tenido la suerte de presenciarlo, lo hayas visto en películas para adultos, o todavía no tengas pruebas reales de que esto ocurre (alerta de spoiler: ¡es real!), probablemente tienes preguntas. ¿Cómo y por qué sucede? ¿Todo el mundo puede hacerlo? ¿Es orina? Y lo más importante, ¿por qué es algo tan excitante?
El squirting es en realidad más común de lo que piensas. De hecho, un estudio realizado en 2024 encontró que el 40% de las personas con vulva adultas en los Estados Unidos han eyaculado en algún momento de su vida, y dos tercios de ellas descubrieron esta capacidad de manera accidental. (Eso es lo que llamamos un accidente feliz). Dicho esto, la gran mayoría de las personas con vulva en este estudio —un 75%— informaron que usaron técnicas específicas para lograrlo.
Aunque el squirting puede ocurrir simultáneamente con el orgasmo, a menudo no es así: solo el 20% de las personas con vulva dicen que ambos eventos suceden al mismo tiempo. Aun así, sin importar cómo o cuándo suceda, parece ser que a algunas personas les gusta. Por ejemplo, la actriz de cine para adultos Jiz Lee, quien contribuyó con una sección sobre el squirting en el libro Girl Sex 101, lo describe como una “liberación poderosa”. Sin embargo, es importante recordar que no todas las personas desean experimentar esta sensación; algunas reportan que es demasiado intensa emocionalmente. Por lo tanto, antes de empezar tu noble investigación sobre cómo facilitar el squirting, probablemente querrás preguntar a tu pareja si están dispuestos a intentarlo.
Y si lo están, no te sorprendas si solo ver este despliegue épico te excita.
“El squirting es una confirmación visual que resulta muy satisfactoria para nuestro cerebro”, dice Kenneth Play, educador sexual y especialista en squirting, en una entrevista con Men’s Health. “Nos indica que hemos tenido éxito. Lo registramos porque se parece a la eyaculación masculina, por lo que genera una respuesta de dopamina que nos dice que hemos ganado”.
Según Lola Jean, educadora sexual y autoproclamada “squirter olímpica”, el squirting es uno de los actos sexuales más incomprendidos y menos investigados. Así que, despejemos todas las dudas y separemos los mitos de los hechos, ¿de acuerdo?
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¿Todas las personas con vulva pueden eyacular?
El porno convencional ha llevado a algunos espectadores a creer que el squirting es mucho más común de lo que realmente es. En realidad, no todas las personas con vulva lo hacen.
“Algunas personas eyaculan una vez o al alcanzar el orgasmo, otras lo hacen repetidamente, y algunas no lo experimentan en absoluto”, dice Lee. Aun así, la mayoría de las personas con vulva reportan tener alguna capacidad para eyacular. Un estudio realizado en 2017 encontró que el 69% de las personas con vulva entre los 18 y 39 años han experimentado la eyaculación durante el orgasmo.
Un dato curioso sobre el squirting en el porno: gran parte de esos chorros intensos que ves en pantalla no son realmente eyaculaciones. A menudo, las actrices se inyectan agua en la vagina, la retienen y luego la liberan cuando el equipo de cámara se los indica. Es importante recordar que, aunque el porno es muy entretenido, no deja de ser eso: entretenimiento. No deberíamos esperar que el sexo en la vida real se parezca a una película para adultos. Eso sería como esperar que un viaje al supermercado sea como una persecución de autos en Rápidos y Furiosos.
¿Qué es exactamente el squirting?
Durante mucho tiempo, no sabíamos si el squirting era lo mismo que orinar, de dónde provenía o cómo funcionaba. Sin embargo, un estudio de 2023 publicado en el Journal of Sex Research ha ayudado a aclarar algunos misterios. Según la investigación del Dr. Devon Hensel y sus asociados, existen en realidad dos tipos de squirting: uno es la eyaculación femenina, y el otro es un tipo de squirting más intenso que proviene de la vejiga.
La eyaculación femenina ocurre cuando las glándulas de Skene se estimulan durante la estimulación interna del complejo clitouretralvaginal. Cuando algunas personas con vulva están lo suficientemente excitadas, pueden expulsar un líquido claro a través de la uretra, de manera similar a como las personas con pene eyaculan, aunque en este caso, el proceso no tiene nada que ver con la reproducción. Este líquido es una sustancia alcalina, similar al fluido prostático en los hombres.
Sin embargo, si eres alguien que eyacula con la intensidad de un hidrante, ese líquido proviene de la vejiga, no de las glándulas de Skene. Esto nos lleva al segundo tipo de squirting, que se caracteriza por ser una expulsión más intensa de líquido a través de la uretra. Este líquido no es exactamente orina, pero dado que proviene de la vejiga, definitivamente contiene algo de orina diluida.
Según un estudio de 2013, la cantidad de líquido expulsado por las personas con vulva puede variar entre 0,3 ml y más de 150 ml. Algunos cuerpos simplemente expulsan más líquido que otros, y los niveles de hidratación también pueden influir en la cantidad. “No significa que lo hayas hecho mejor si hay más líquido”, explica Jean.
¿El squirting es lo mismo que orinar?
Bueno, sí y no. La eyaculación femenina que proviene de las glándulas de Skene no es orina. La composición exacta del líquido eyaculado ha sido tema de debate durante mucho tiempo, pero esto es lo último según una revisión de literatura de 2021: los estudios anatómicos han demostrado que el squirting se origina en las glándulas de Skene y contiene antígeno prostático específico (PSA), que se encuentra comúnmente en el fluido prostático. También sabemos que el eyaculado difiere de la orina en su concentración de creatinina y urea.
“Es comprensible que la gente piense que es orina, ya que sale por el mismo lugar”, dice Lee. “Aunque es cierto que algunas personas pueden orinar durante el sexo, el [eyaculado] es un fluido diferente con una composición química distinta”.
Dicho esto, hay algo de orina en ese squirting más intenso que algunas personas experimentan. Así que, la respuesta sobre si el squirting es orina es bastante compleja. En última instancia, no importa qué sea el squirting: para muchas personas con vulva, la eyaculación se siente bien, así que centrémonos en la parte placentera de este proceso mágico del cuerpo.
¿Ahora me dirás cómo hacer que mi pareja eyacule?
Casi. Antes de que tú y tu pareja se pongan manos a la obra, pregúntate: ¿Para quién es esto?
“El squirting no siempre va acompañado de un orgasmo, y no todas las personas lo encuentran placentero”, dice Jean. Un estudio de 2021 con 28 eyaculadoras encontró que algunas participantes se sentían avergonzadas por la respuesta natural de su cuerpo o consideraban que la sensación no era agradable, mientras que otras consideraban su capacidad para eyacular como un “superpoder”.
¿Quieres que tu pareja eyacule por su bien, porque quieres que tenga la experiencia sexual más placentera posible? ¿O lo quieres por tu propio ego? Si es lo segundo, entonces tú y tu pareja no deberían intentar el squirting. Pregunta a tu pareja si esto es algo que le gustaría intentar. Si no le interesa, concéntrate en otras actividades sexuales que ambos disfruten.
Si ambos están dispuestos a intentarlo, aquí tienes lo que debes hacer a continuación.
Prepárate
Primero, preparen sus cuerpos. Asegúrate de que tu pareja esté bien hidratada. Dado que probablemente usarás tus dedos, debes lavarte las manos y asegurarte de que tus uñas estén recortadas y limadas para evitar cortes o abrasiones.
Luego, prepara el espacio. El squirting puede mojar bastante, y si tú o tu pareja están preocupados por hacer un desorden, probablemente no lo disfrutarán tanto. “Coloca una toalla grande, un protector de colchón o una manta sexual, como las que fabrica Liberator, para facilitar la limpieza y reducir las preocupaciones sobre ‘mojar’ la cama”, dice Lee.
Dicho esto, si tu pareja nunca ha hecho squirting antes, anticipar una especie de cascada puede generar bastante presión. Habla con tu pareja sobre qué le haría sentir más cómoda. Si prefieren no poner una toalla, está bien: siempre puedes lavar la ropa de cama después del sexo si es necesario. Por supuesto, si tu pareja sabe que puede soltar grandes cantidades de líquido, tal vez esté dispuesta (¡y entusiasmada!) a usar alguna forma de protección para el colchón.
Quita la presión
El squirting debe ser más sobre el proceso que sobre el objetivo final. “Cada vez que te acercas al sexo con una meta en mente, existe el potencial de que se genere presión, lo que puede crear frustración y decepción”, dice Lee. “Desecha todo ese concepto de meta y parte simplemente de la posibilidad de incluir algo nuevo y emocionante”. Recuerda que, incluso si tu pareja no logra hacer squirting en el primer (o décimo) intento, al menos ambos se divirtieron intentando.
Aumenta la excitación de tu pareja
Encender a tu pareja preparará su cuerpo para el squirting. “La excitación no solo engrosará la esponja perineal y la esponja uretral, haciéndolas más receptivas al tacto, sino que también ayudará a aumentar los fluidos en las glándulas de Bartholin (responsables principalmente de la lubricación vaginal) y en las glándulas parauretrales (principalmente responsables de la lubricación uretral)”, explica Jean.
No existe una manera universal de poner a una pareja en el mood, así que si aún no estás familiarizado con las cosas que excitan a tu pareja, pregúntale qué le apetece. Puede que le gusten los besos, las conversaciones eróticas, la estimulación digital del clítoris, el sexo oral, la estimulación de los pezones, los juegos de roles, el porno, los juguetes sexuales, los azotes o algo completamente diferente.
Intensifica la estimulación del clítoris y la vagina
Cada persona es diferente cuando se trata de squirting. Algunas personas necesitan una estimulación firme del punto G. Otras prefieren un roce suave del clítoris. Algunas personas con vulva pueden incluso eyacular sin estimulación directa en la vulva. Debido a esto, hay varias técnicas que puedes probar. Debes explorar varios métodos con tu pareja y, recuerda, la comunicación es clave. “Escucha las señales físicas y verbales, como la cantidad de presión a aplicar, la velocidad de los movimientos, si es necesario añadir besos o estimulación del clítoris, etc.”, dice Lee.
Una técnica popular consiste en combinar la estimulación del clítoris y el punto G usando tus dedos o juguetes sexuales. “Aunque las personas pueden hacer squirting con la penetración del pene, es mucho más probable que ocurra con las manos o juguetes sexuales curvos”, explica Lee. “El Pure Wand de Njoy es un favorito; su curva en forma de C facilita sostenerlo y aplicar una buena presión”.
Puede que pienses que para lograr que tu pareja haga squirting necesitas mover la mano de forma agresiva y aplicar la mayor presión posible. Pero esto no siempre es necesario. “El cuerpo de cada persona es diferente, y aunque a muchos les gusta una amplia gama de intensidades, estas son zonas altamente sensibles del cuerpo, por lo que es posible que no deseen que las bombardeen con movimientos intensos”, dice Jean.
Prepárate para el empujón final
“Una vez que escuchas el sonido de ‘splash splash’, lo que significa que tu pareja está realmente mojada, te digo que tu pareja es capaz de hacer squirting; solo tiene que descubrir cómo sacar el líquido de su cuerpo”, dice Jean. Para algunas personas con vulva, eso implica empujar hacia afuera utilizando los músculos del suelo pélvico.
A menudo, las personas con vulva informan que sienten como si necesitaran orinar justo antes de hacer squirting, lo cual tiene sentido, considerando que el líquido sale de la uretra. Esto desanima a algunas personas porque temen que estén a punto de orinar. Saber que esta sensación es común puede ayudar a tu pareja a relajarse y atravesar la confusión de ese sentimiento.
Una vez que tu pareja dé la señal de que está a punto de eyacular, mantén la estimulación externa. “Debes estar al tanto de que los juguetes o las manos pueden bloquear la apertura uretral en ese importante momento de expulsión del fluido, así que prepárate para moverlos cuando sea necesario”, dice Lee. “Algunas personas piden a sus parejas que se retiren justo antes de que comience el squirting”.
Puede que lo intentes todo y tu pareja no haga squirting. Esto está perfectamente bien y no significa que hayan hecho algo mal. Siempre pueden intentarlo de nuevo si ambos lo desean (¿y no la pasaron bien, cierto?). Y ya sea que tu pareja haga squirting o no, recuerda la importancia del aftercare.
¿Qué posiciones son las mejores para lograr que tu pareja haga squirting?
A veces, un pequeño cambio en la posición del cuerpo puede marcar una gran diferencia durante el sexo. La posición correcta puede convertir una sesión de juego promedio en una experiencia inmensamente satisfactoria, y esto es cierto cuando intentas que tu pareja haga squirting. Querrás usar tus dedos o un juguete para la estimulación, dice Gigi Engle, A.C.S., educadora sexual certificada y experta en intimidad de 3Fun.
Mariposa
Haz que tu pareja se recueste y extienda las rodillas hacia los lados. Arrodíllate entre ellas y estimula con tus dedos o un juguete.
“Esto da mucho acceso a la zona y facilita mover los dedos o el juguete en el movimiento ascendente necesario para estimular las glándulas de Skene y la esponja uretral”, dice Engle.
Perrito
El estilo perrito coloca a tu pareja en una posición óptima para el movimiento ascendente necesario para proporcionar la estimulación correcta y lograr el squirting. Arrodíllate detrás de ella y aplica estimulación mientras te inclinas hacia el ombligo.
Vía Men’s Health
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