Qué hacer cuando te enteras de que un amigo está siendo infiel
¿Está la amistad por encima de todo? ¿Debemos defender a un amigo a pesar de que pensemos que lo que hace no está bien?
Las infidelidades son una cosa muy compleja de gestionar incluso aunque nosotros no tengamos nada que ver con ellas, sino que simplemente “nos tocan” cerca.
Una infidelidad plantea, fundamentalmente, una cuestión de confianza. Incluso en el caso de que quien esté llevando a cabo la infidelidad sea un amigo. ¿Qué harías si descubres que una persona muy cercana está siendo infiel a su pareja? ¿Se lo contarías? ¿Hablarías con él o ella? Sin duda, se trata de una situación complicada en la que además se pone en juego su amistad, su relación, el respeto o no a tus propios valores, etc.
Esta traición a los propios valores no es algo que pueda pasarse por alto. Puede provocar sentimientos negativos de culpa o vergüenza importantes, que tienen bastante que ver con el trastorno de estrés postraumático que sufren, por ejemplo las personas que han estado en una guerra. Pero entonces, ¿qué hacemos?
Cómo proceder cuando un amigo está siendo infiel a su pareja
El filósofo Daniel Koltonski intentó responder a esta compleja cuestión en la revista Refinery29. El especialista citaba un trabajo de los profesores de filosofía australianos Dean Cocking y Jeanette Kennett, en el que afirmaban que “en realidad, la amistad lleva consigo el peligro de corromper tu propia moralidad porque la amistad implica que te sometas a la decisión de tu amigo en una amplia variedad de circunstancias, independientemente de lo que los motive”.
Según esto, entonces, si nuestro amigo nos pide que no revelemos su infidelidad, tendríamos que ser fieles a él y no hacerlo. Pero, evidentemente, la cosa no es tan sencilla. En principio, la amistad también es dejar que tus amigos tomen sus propias decisiones y por lo tanto protegerlos ante esos errores, pero siempre se tendrían que dar tres condiciones.
La primera sería que tu amigo debería tener más que perder que tú en el caso de que cuentes lo que ha hecho. La segunda, que él haría lo mismo por ti en una situación similar. Y la tercera que deberías creer que haciendo lo que ha hecho, está haciendo lo correcto. Si no se dan estas condiciones el argumento se tambalea.
RELACIONADA: Qué es el ‘síndrome de Voldemort’ y cómo puede afectarte tras una ruptura amorosa
Las motivaciones son importantes
Según Koltonski, la motivación de tu amigo para hacer lo que ha hecho y querer ocultárselo a su pareja también es muy importante. “¿Quiere evitar hacerle daño? ¿Quiere confesar él mismo en el momento más adecuado? ¿O quizá quiere seguir siendo infiel y salirse con la suya?”, explica el filósofo.
Evidentemente tu actitud tendría que ser una u otra dependiendo de las respuestas a esa pregunta.
El mayor problema
Es cierto que todo el tiempo se hacen cosas que atentan contra la moral, nadie es perfecto y es muy fácil hacer daño a las personas casi con cada paso que damos. Al final, según el profesor, en esta cuestión lo más importante es hasta qué punto valoramos o no la amistad de nuestro amigo y si queremos conservarla o no.
Tenemos que preguntarnos si un amigo de verdad nos pondría en esta situación. Y posteriormente, ¿queremos ser amigos de una persona que engaña a su pareja? ¿En qué tipo de persona nos convertimos si apoyamos ese comportamiento? En muchas ocasiones, presenciar una cosa así en un amigo nos suele hacer sentir que no lo conocemos realmente y plantearnos si de verdad podemos confiar en él.
Por lo tanto, se trata de una cuestión complicada y que no tiene una respuesta única. Realmente depende de cada persona y de sus propias convicciones. Si estamos cómodos con la decisión que hemos tomado, probablemente ha sido la decisión más correcta, independientemente de si eso implique conservar la amistad o no.
Vía Men’s Health ES