¿Sientes náuseas después de hacer ejercicio? Debes saber esto
Como atleta, puedes enfrentar muchas cosas, pero el reflujo ácido no es algo que prefieras.
Entrenar aporta muchos beneficios a las personas: brinda una sensación de confianza, diversión, salud y satisfacción. Y ocasionalmente, una sensación de náuseas después de hacer ejercicio. ¿Por qué sucede eso? ¿Y qué puedes hacer al respecto?
¿Qué causa las náuseas después de hacer ejercicio?
Especialmente cuando te involucras en entrenamientos intensos, la náusea puede convertirse en una ocurrencia común. “Cuando entrenas duro, el flujo sanguíneo en tu cuerpo cambia”, explica el especialista en ejercicio Joel Seedman a SELF. “Tu cuerpo dirige la sangre principalmente hacia los músculos para transportar oxígeno y nutrientes. La circulación sanguínea alrededor del estómago e intestinos disminuye, lo que también ralentiza la digestión. Y esto conduce a (lo adivinaste) una reacción de náuseas después de hacer ejercicio o incluso vómitos”.
Entonces, tu tracto gastrointestinal no recibe suficiente apoyo de tu cuerpo porque está principalmente enfocado en apoyar los músculos. Las náuseas después de hacer ejercicio pueden ocurrir, especialmente cuando haces ejercicio con una intensidad a la que tu cuerpo no está acostumbrado. Presta atención a la intensidad de tus entrenamientos, como durante un circuito de HIIT, sprints o carreras de larga distancia.
Según un estudio de 2017 en la Revista Internacional de Nutrición Deportiva y Metabolismo del Ejercicio, los corredores examinados experimentaron náuseas durante un tercio de sus entrenamientos durante un mes. Los síntomas variaron desde náuseas hasta la necesidad de vomitar.
¿Qué hacer cuando sientes náuseas después de hacer ejercicio?
“Una de las mejores cosas que puedes hacer cuando sientes náuseas después de hacer ejercicio es caminar lentamente”, aclara Seedman. “Esto le da tiempo a tu cuerpo para recuperarse lentamente mientras se mantiene en movimiento. También puede ayudar recostarte con los pies en alto. De esta manera, más sangre fluye hacia tu tracto gastrointestinal”.
Consejo adicional: no bebas grandes sorbos de agua si te sientes nauseabundo después del ejercicio, sino toma pequeños sorbos.
Además, a largo plazo, puede ayudar hacer ejercicio de manera más tranquila. Si siempre sientes náuseas después de hacer ejercicio, es probable que te estés esforzando demasiado. Además, en lugar de ejercitar todo tu cuerpo, concéntrate en diferentes partes del cuerpo cada día. Por ejemplo, enfócate en la parte superior del cuerpo un día y en la parte inferior del cuerpo al siguiente. De esta manera, tu cuerpo solo necesita redirigir la sangre hacia una parte de los músculos.
Cuida tu dieta
Cuando se trata de prevenir las náuseas, también es importante lo que haces antes de hacer ejercicio. “Si te dispones a hacer un entrenamiento intenso, es esencial que obtengas suficiente combustible de antemano”, explica Seedman. “Pero no querrás comer demasiado: el exceso de comida en el estómago durante el ejercicio puede provocar náuseas. Ya que no llega suficiente sangre al estómago para una digestión óptima”. Además, ayuda planificar tu comida una hora y media a tres horas antes de tu entrenamiento.
Además, no es recomendable consumir alimentos ricos en grasas antes de hacer ejercicio. La grasa permanece más tiempo en el estómago y tarda más en digerirse.
Y no olvides beber suficiente agua: la deshidratación afecta la circulación sanguínea. Así que asegúrate de beber lo suficiente antes de tu sesión de entrenamiento. Pero trata de minimizar tu consumo de agua en los quince minutos previos a tu entrenamiento.
Vía Men’s Health NL
