Nutrición

Aquí están las proporciones de macronutrientes para tres populares dietas

¿Cuántos gramos de macronutrientes se permiten en una dieta paleo, baja en carbohidratos y cetogénica?

Por: Martyn de Jong y Vera Dassen

16 enero, 2024

¿Estás averiguando qué dieta se adapta mejor a tu cuerpo y preferencias? En este artículo, aprenderás sobre las proporciones de macronutrientes para las dietas paleo, baja en carbohidratos y cetogénica.

Estas son las proporciones de macronutrientes para tres populares dietas.

Nota: Los porcentajes a continuación son estimaciones. Pruébalo y observa qué funciona mejor para tu cuerpo.

Dieta paleo

40% proteínas
40% grasas
20% carbohidratos

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La dieta paleo implica dejar de consumir azúcar, granos, legumbres, lácteos y la mayoría de tus carbohidratos. Paleo es la palabra griega para antiguo, así que estás siguiendo una dieta ‘antigua’. Esto no significa que sólo comas pan antiguo, sino que tu dieta es similar a la que tenían los antiguos cavernícolas. Un principio importante de la dieta paleo es que los intestinos no se irritan por lectinas, gluten u otras sustancias.

Dieta baja en carbohidratos

40% proteínas
50% grasas
10% carbohidratos

Una dieta baja en carbohidratos es aquella en la que obtienes relativamente más energía de las proteínas y las grasas y menos energía de los carbohidratos. Si quieres mantener baja tu ingesta de carbohidratos, entonces la dieta baja en carbohidratos es para ti. Muchas dietas bajas en carbohidratos están destinadas a la pérdida de peso. También se utilizan en enfermedades como la diabetes.

Dieta cetogénica

20% proteínas
75% grasas
5% carbohidratos

Esta es la forma más estricta de una dieta baja en carbohidratos. La dieta cetogénica es una dieta baja en carbohidratos en la que el 60 al 80 por ciento de tu ingesta calórica total proviene de las grasas. Se utiliza principalmente con fines médicos, por ejemplo, para personas con epilepsia o diabetes tipo 2.

Cuando consumes pocos o ningún carbohidrato, tu cerebro recibe la señal de que no hay más glucosa en el cuerpo. En ese momento, se accede a un combustible de reserva: cetonas. Comer menos carbohidratos (y tener, por lo tanto, un bajo nivel de azúcar en la sangre) lleva a una mayor cetogénesis.