Una actitud positiva hacia el ejercicio podría ayudarnos a sentirnos mejor acerca de envejecer, según la investigación
Las canas rara vez son recibidas con los brazos abiertos, pero mantenerse activo definitivamente puede ayudarnos al envejecer.
Ya sea notar la aparición de un par más de canas o tal vez unas cuantas arrugas en la frente, los signos de envejecimiento rara vez son bienvenidos. Pero una nueva investigación ha revelado que podríamos sentirnos más optimistas acerca de envejecer si también tenemos una actitud positiva hacia nuestra rutina de ejercicios.
Evidencia publicada por Physical Activity and Health encontró que poseer una actitud placentera hacia el ejercicio estaba asociado con menos temor a las interacciones sociales, menos preocupaciones psicológicas, así como una puntuación total más baja de ansiedad por el envejecimiento.
‘Uno de los hallazgos más importantes es que una mayor positividad sobre la actividad física se relaciona con una menor ansiedad sobre el envejecimiento’, dijo la investigadora y dietista Sarah Francis.
‘Quizás esto se deba a que los beneficios físicos, mentales y sociales de mantenerse activo contribuyen al bienestar general y a una percepción más favorable del proceso de envejecimiento, reduciendo en última instancia la ansiedad relacionada con el envejecimiento’, agregó.
1,250 personas de siete estados en Estados Unidos respondieron a la encuesta para la investigación realizada. Francis explicó a Science Daily que querían una variedad de participantes de diferentes orígenes para la encuesta. La encuesta incluyó a personas de 40 años en adelante, lo que permitió a los investigadores comprender cómo se desarrollan diferentes aspectos de la ansiedad por el envejecimiento con el tiempo.
El estudio también encontró que el entrenamiento de fuerza, en particular, ayudó a los adultos mayores a conservar la masa ósea y muscular, reducir el riesgo de demencia y retener el control motor. Esto significa que los beneficios del entrenamiento al envejecer podrían ayudarnos a reducir la probabilidad de malos resultados por caídas, y tal vez incluso la probabilidad de que ocurran.
Ya sea que nuestros objetivos sean mejorar nuestra fuerza física o mental, la investigación actual sugiere abrumadoramente que el ejercicio en los últimos años enriquecerá nuestras vidas mucho más allá de simplemente lucir músculos en nuestra camiseta.
Si bien muchos enfrentan barreras para hacer ejercicio, como el temor a las lesiones y la falta de transporte a los gimnasios, este interesante estudio podría cambiar las opiniones negativas sobre el ejercicio al envejecer. Francis espera que la investigación también contribuya a mejorar el acceso al ejercicio mediante la inclusión de actividades en el hogar.
‘Siempre es importante escuchar a tu audiencia’, dice Francis. ‘Hacer este tipo de trabajo ayuda a asegurar que el mensaje resonará con aquellos con quienes estás tratando de trabajar, y no es un enfoque único para todos’.
Vía Men’s Health UK